Además de los cuidados dietéticos, que nos ayudan a luchar contra el estrés oxidativo propio de la exposición solar estival, es posible ayudar a la piel a recuperarse mediante el aporte de sustancias, como antioxidantes y oligoelementos, a través de la mesoterapia facial .
Tal y como declara la Sociedad Española de Medicina Estética, la principal indicación de la mesoterapia es la prevención y el tratamiento del envejecimiento cutáneo y se realiza mediante microinyecciones en las zonas de la piel afecta.
Su principal indicación es la prevención y tratamiento del envejecimiento cutáneo. Como tratamiento preventivo, la mesoterapia facial se debe realizar a partir de los 30 años, aunque no existe límite de edad para obtener un efecto rejuvenecedor en las zonas tratadas.
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¿Qué sustancias son las más utilizadas en mesoterapia facial?
Los productos utilizados más frecuentemente por los médicos de Instituto Médico Láser de Madrid son las vitaminas y el ácido hialurónico , además de una gran variedad de medicamentos homeopáticos que hidratarán la piel en profundidad y estimularán la formación de colágeno y elastina disminuyendo la flacidez cutánea.
Las vitaminas aportan defensa frente al estrés oxidativo de la irradiación solar porque unen los radicales libres. Las vitaminas que se pueden emplear en mesoterapia como parte de los cócteles tolerados por la piel y altamente probados por los laboratorios fabricantes son:
Vitamina A
Los beta-carotenos (precursores de la vitamina A) son probablemente los que contribuyen en mayor medida a proteger la piel de la exposición solar, pues ayudan a que se produzca el bronceado y favorecen el desarrollo de pigmentos en la piel. Los beta-carotenos no se acumulan, el organismo sólo absorbe lo que precisa y el resto lo deshecha.
Vitamina E
El alfa-tocoferol o vitamina E es la vitamina antioxidante por excelencia. Actúa en sinergia con la vitamina A y el selenio como agentes antioxidantes de membrana celular.
Vitamina C
Es un potente antioxidante soluble en agua y por tanto puede alojarse incluso en el interior de las células. Pero además participa en la síntesis del colágeno.
Los seres humanos dependemos de la fuente exógena de esta vitamina porque carecemos de la última enzima de la biosíntesis del ácido ascórbico (vitamina C) a partir de la glucosa.
La vitamina C funciona como reductor de diferentes reacciones del metabolismo del colágeno y su deficiencia se asocia a la disminución de la biosíntesis de procolágeno y una reducida hidroxilación de los residuos de prolina y lisina, con lo que la molécula de colágeno resultante es menos estable de lo habitual.
Vitaminas del grupo B
B1 (tiamina), B2 (riboflavina), B5 (ácido pantoténico) y B6 (piridoxina). Son vitaminas solubles en agua que participan en el metabolismo de las proteínas, la generación de energía y tienen una función protectora de la piel.
Además es importante utilizar en sinergia los oligoelementos antioxidantes.
No todos los oligoelementos antioxidantes se pueden emplear en vía mesoterápica: de entre ellos, hoy en día podemos emplear como solución inyectable el silicio. Tiene una función importante como antioxidante por que inhibe la peroxidación lipídica. Además tiene un papel fundamental en la regeneración del tejido conjuntivo ya que interviene en la correcta síntesis de las fibras de colágeno.
El oligoelemento para la mesoterapia antioxidante: silicio orgánico.
- El silicio orgánico forma parte constitucional de la elastina, el colágeno, los proteoglicanos y las glicoproteínas.
- Regula, normaliza y estimula la división celular y su metabolismo.
- Es un importante biocatalizador que interviene en variadas reacciones enzimáticas.
- Es un potente antioxidante que evita la peroxidación lipídica, funciona como un antioxidante de membrana, ya que evita la formación de radicales libres por reorganización de los lípidos de la membrana celular. Los silanoles o derivados del silicio generan una reorganización de los lípidos de membrana y evitan así la citotoxicidad de los radicales libres. Reorganiza la membrana celular, aumentando así su resistencia al ataque de los peróxidos.
Otro efecto del silicio es que inhibe la formación de los radicales libres por orientación de hidrólisis de los triglicéridos hacia la producción de ácidos grasos insaturados.
Un valor añadido es que el silicio evita la glicosilación no enzimática de la matriz extracelular o, lo que es lo mismo, que la matriz extracelular no se torne rígida e inelástica, originando un envejecimiento prematuro.
- La frecuencia del tratamiento de la mesoterapia antioxidante que propone IML es de una sesión cada dos semanas hasta una media de seis sesiones en total. Recomendamos realizar una sesión de mantenimiento cada 6-8 semanas, en función del grado de estrés oxidativo de la piel del paciente y del daño solar que manifieste su piel.
- La mesoterapia antioxidante puede resultar recomendable como tratamiento preventivo contra el envejecimiento a partir de los 30 años.
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