El estrés, la contaminación, los cambios de temperatura e incluso la falta de hidratación puede afectar a la salud y aspecto de nuestra piel. Por ello, es de suma importancia seguir una buena rutina facial para mantener su elasticidad e hidratación y evitar así la aparición de las líneas de expresión.
Gracias a un constante cuidado dermatológico podremos frenar la aparición de arrugas. Además, los productos naturales, al contar con multitud de propiedades, suelen ser bastante eficaces y beneficiosos para nuestra piel. Sin embargo, se debe ser constante con su uso ya que los resultados comienzan a percibirse en un plazo de tiempo más largo que con otros productos con otro tipo de principios activos.
Por ello, desde Instituto Médico Láser (IML) te proponemos diferentes tratamientos faciales caseros para prevenir o mejorar las indeseadas arrugas.
Tratamiento facial casero para arrugas
Gracias a las propiedades de algunos elementos naturales podremos realizar tratamientos faciales caseros con los que obtener excelentes resultados. Nuestro favorito es, sin duda, el elaborado con aceite de coco y bicarbonato de sodio, dos ingredientes muy usados en la cosmética natural.
Este tratamiento casero es ideal no sólo para disimular las arrugas o prevenir su aparición, también para contribuir suavente con el objetivo de mejorar manchas, cicatrices y otras alteraciones cutáneas producidas en nuestro rostro.
Para ello necesitaremos:
- 4 cucharadas de bicarbonato de sodio
- 6 cucharadas colmadas de aceite de coco sólido (100% orgánico)
- Un utensilio de madera
- Un recipiente de cristal
Una vez tengamos nuestros ingredientes preparados, en tan solo cinco minutos tendremos un tratamiento facial casero para el tratamiento para eliminar arrugas. Para ello tendrás que mezclar ambos ingredientes en un recipiente mediano de vidrio y remover bien con un utensilio de madera hasta que quede una pasta homogénea. ¡Y ya tendrás listo tu tratamiento antiarrugas! Así de sencillo.
Guarda la mezcla en un frasco de vidrio cerrado herméticamente en un lugar seco y fresco para que se conserve incluso hasta dos meses. Sobre la piel limpia y seca, aplica una pequeña cantidad de tu tratamiento casero sobre la piel del rostro haciendo pequeños círculos y ejerciendo algo de presión. Deja actuar unos 20 minutos y retira el producto con abundante agua tibia. Seca el rostro a pequeños toques con una toalla limpia.
Notarás como tu piel luce más brillante, hidratada y como mejoran suavemente las líneas de expresión. Aplica este tratamiento unas 3 veces por semana, preferiblemente por las noches cuando nuestra piel ya no tenga que someterse a más agentes externos. Intercala tu tratamiento facial casero para eliminar las arrugas con otras técnicas y procedimientos médico-estéticos que realizamos en IML y consejos que harán que tu piel luzca cada vez mejor. Los masajes faciales, por ejemplo, son el complemento perfecto para combinar con el tratamiento casero de aceite de coco y bicarbonato que te recomendamos.