La cirugía de mentón es un procedimiento que llevamos a cabo en el Instituto Médico Láser (IML) para mejorar la simetría del rostro. El tratamiento es estético y mínimamente invasivo, y con él logramos unos resultados muy naturales. Para ello, es crucial realizar un análisis previo personalizado con el fin de elaborar una hoja de ruta personalizada sobre los pasos que se darán para mejorar la forma, tamaño y proyección de la barbilla. Estos son:
Es necesario contar con un diagnóstico previo e, incluso, con radiografías de esta zona facial. Una vez el cirujano ha evaluado el diagnóstico realizado, determina cómo va a realizar la mentoplastia y cuáles van a poder ser los posibles resultados.
Durante la intervención, en IML CLINIC se aplicará anestesia general. Después, se realizará el tipo de cirugía que el cirujano prefiera, según sea el caso del paciente.
En este artículo encontrarás
Tipos de cirugía de mentón
La cirugía de mentón se puede realizar de dos formas diferentes, dependiendo del objetivo estético que el paciente desea conseguir.
Mentoplastia de aumento: se realiza cuando la persona desea mejorar la proyección de su mentón. En IML CLINIC realizamos la mentoplastia con osteotomía, es decir, que se reduce el mentón y se pone una mini placa. Esta siempre se realiza con anestesia general para asegurar la vía aérea del paciente.
Mentoplastia de reducción: esta intervención busca suavizar la forma o el tamaño del mentón para conseguir una mayor armonía y proporcionalidad del resto de estructuras faciales. En este caso también realizamos la mentoplastia con osteotomía, es decir, que se reduce el mentón, pero con la diferencia de que no se pone la mini placa. También es realizada bajo anestesia general.
Cirugía de mentón: indicaciones y contraindicaciones
Volvemos a recordar que para someterse a una cirugía de mentón hay que tener un diagnóstico previo que permita garantizar la idoneidad de someterse a este procedimiento. Asimismo, es fundamental tener claro que en IML CLINIC se realiza mediante la mentoplastia de osteotomía, que utiliza el propio mentón del paciente mediante cortes y avances sin necesidad de implantes adicionales. En menores casos, puede utilizarse una pieza de silicona o tejidos adiposos.
Asimismo, es importante tener en cuenta que durante el proceso de la mentoplastia el cirujano puede llegar a mover otros huesos para conseguir un resultado bonito y natural. Y aunque depende de las características y particularidades físicas de cada paciente, el procedimiento, por lo general, suele durar entre una y dos horas. Además, la cirugía de mentoplastia puede combinarse y realizarse incluso al mismo tiempo que una rinoplastia o una liposucción facial para conseguir unos resultados completos.
Ahora bien, ¿para quién está contraindicada la mentoplastia? Pues para los pacientes que tengan alguna infección activa, estén embarazadas, su sistema inmune se encuentre debilitado (por haberse sometido a un tratamiento para combatir un cáncer, por ejemplo) o haya un problema que provoque una mala cicatrización de los tejidos.
Cirugía de mentón: riesgos y complicaciones
La cirugía de mentón presenta algunos riesgos y complicaciones, como todo procedimiento, aunque debido a que en IML CLINIC esta es mínimamente invasiva estos se reducen de manera considerable. Algunos de ellos son los siguientes:
- Reacción adversa a la anestesia, por eso, existe la posibilidad de decantarse por la anestesia local que tiene menos reacciones indeseadas.
- Migración del implante a un lugar distinto, lo que podría requerir una nueva cirugía para recolocarlo y que no se vuelva a mover de su lugar.
- Infección derivada de la intervención que requeriría de antibióticos para poder solucionarla. No es una complicación habitual.
Cirugía de mentón: antes y después
El antes de la cirugía de mentón consistirá en la realización de las pruebas oportunas para poder someterse a esta intervención sin riesgos. Al paciente se le harán las radiografías necesarias y, también, se necesitará el visto bueno del médico de cabecera que revisará su historial de salud para comprobar la idoneidad de que se someta a este procedimiento.
Después de la intervención, el paciente podrá retomar sus actividades normales cuando pasen 10 días y para hacer el ejercicio físico deberá esperar unas 3 semanas. Los resultados son permanentes y la armonía facial será evidente.
Como el proceso y se lleva a cabo de manera ambulatoria, el paciente no necesitará pasar la noche en el hospital, bastará con unas cuatro a cinco horas de observación post-operatoria y luego podrá recuperarse tranquilamente en casa. Además, esto será más rápido que si se realizase una cirugía más invasiva. Por lo tanto, si deseas corregir tu mentón, ponte en contacto con nosotros.
Te esperamos en IML CLINIC para una consulta personalizada.