Diferencias entre Rinoplastia y Rinomodelación

Certificado por Dra. Almudena Royo Pérez

Medicina Estética

Diferencias entre Rinoplastia y Rinomodelación: ambas son técnicas que tienen en común su objetivo de mejorar la estética de la nariz. Sin embargo, cada problema estético de la nariz tiene un tratamiento óptimo muy concreto, por lo que estas técnicas no son sustituibles entre sí. En este artículo explicamos las diferencias entre Rinoplastia y Rinomodelación.

¿Cuáles son las diferencias entre Rinoplastia y Rinomodelación?

Las diferencias entre la Rinoplastias y la Rinomodelación son principalmente 3:

  1. Indicaciones. Cada técnica tiene una indicación concreta.
  2. Características de cada técnica. Una es quirúrgica y la otra no quirúrgica.
  3. Resultados. Una obtiene resultados permanentes y la otra, temporales.

¿Cuáles son las indicaciones concretas de la Rinoplastia y de la Rinomodelación?

La Rinoplastia es la cirugía por la que se modifican aspectos de la estructura de la nariz, tanto estéticos como funcionales, especialmente los más pronunciados. Ejemplos: una nariz demasiado ancha o larga, un tabique desviado u otros problemas que pueden ocasionar dificultad al respirar.

También se aplica cuando la modificación de la nariz se produjo por un accidente o por una enfermedad.

La Rinomodelación es el conjunto de tratamientos que permiten mejorar imperfecciones muy concretas de la nariz, de grado leve o moderado, principalmente en la punta y el dorso.

La Rinomodelación no modifica las estructuras óseas de la nariz.

¿Cuáles son las características de cada técnica?

La Rinoplastia es una cirugía, es decir, un tratamiento quirúrgico que requiere ser aplicado en un quirófano, bajo anestesia.

En una Rinoplastia el cirujano realiza incisiones mediante bisturí para acceder a las estructuras óseas y/o cartilaginosas que es necesario tratar para corregir el problema estético o funcional que presenta el paciente.

La Rinomodelación es un tratamiento no quirúrgico cuya aplicación puede realizarse sin quirófano, sin vendajes ni escayola.

Suele consistir fundamentalmente en la infiltración de rellenos como el ácido hialurónico o el empleo del Láser para mejorar aspectos muy concretos de la nariz.

¿Cuáles son los resultados de cada técnica?

Los resultados de la Rinoplastia son definitivos.

Por su parte, los resultados de la Rinomodelación son temporales, ya que el ácido hialurónico y otros materiales de relleno tienen una duración aproximada de entre 12 y 18 meses.

¿Qué es la Rinomodelación con ácido hialurónico?

La Rinomodelación con ácido hialurónico puede mejorar la nariz en zonas concretas, como la punta o el dorso:

  • Camuflar un caballete acentuado
  • Corregir el hundimiento entre dorso y punta
  • Levantar la punta de la nariz

El tratamiento consiste en infiltrar el material de relleno, que suele ser ácido hialurónico de diferentes densidades, en la proporción y a la profundidad exactas para obtener un resultado correctivo y al mismo tiempo muy natural, sin cambiar la expresión facial del paciente.

La Rinomodelación con ácido hialurónico no requiere baja médica, ya que se realiza de forma totalmente ambulatoria y el paciente puede retomar de inmediato su actividad habitual.

En el ejemplo siguiente podemos apreciar, en la imagen izquierda, el hundimiento que presenta la nariz de la paciente, entre el dorso y la punta de la nariz:

Este caso no requería cirugía, ya que el ácido hialurónico es capaz de crear el volumen suficiente para corregir la hendidura y obtener así un dorso nasal más liso y uniforme.

¿El ácido hialurónico puede sustituir a la Rinoplastia?

No, el tratamiento con ácido hialurónico no puede obtener los mismos resultados que la Rinoplastia, ya que ésta es una cirugía que permite modificar las estructuras óseas y cartilaginosas de la nariz, y el ácido hialurónico puede mejorar determinados matices, pero siempre mediante la aportación de volúmenes, sin producir cambios estructurales.

Por lo general, cuando el problema estético es muy acentuado suele ser necesario aplicar la cirugía. Por ejemplo, en casos en los que la nariz es muy larga o muy corta, la abertura de las narinas es muy grande o cuando la giba es muy pronunciada, la Rinoplastia es el tratamiento de elección.

Cuando el problema estético es incipiente o menos pronunciado, puede ser interesante aplicar técnicas mínimamente invasivas y ambulatorias, como el ácido hialurónico, la hidroxiapatita cálcica o los hilos tensores.

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