En Instituto Médico Láser (IML) contamos con diferentes tratamientos estéticos donde la radiofrecuencia facial es la técnica utilizada. Con el objetivo de conseguir resultados satisfactorios, adaptados a las necesidades de cada persona y de manera micro-invasiva (Morpheus), o no invasiva (Velashape III y Exilis) la radiofrecuencia facial se ha convertido en uno de los mejores tratamientos para mejorar la flacidez facial y otras alteraciones dérmicas y subdérmicas que pueden aparecer en el rostro con el paso del tiempo.
Te contamos a continuación en qué consiste este tratamiento estético y cuáles son los principales cuidados después de la radiofrecuencia facial.
En este artículo encontrarás
¿Es eficaz la radiofrecuencia facial?
La radiofrecuencia facial es una técnica utilizada en medicina estética para conseguir mejoras en la piel del rostro. Gracias a la acción térmica que genera en las capas profundas de la piel, se consigue una mayor tensión en la dermis, suavizando arrugas, difuminando alteraciones o eliminando pliegues que con el paso del tiempo hayan podido aparecer.
Contamos con radiofrecuencia no invasiva que deposita la energía del calor a través de la piel, aplicándose desde la superficie cutánea. También disponemos de radiofrecuencia micro-invasiva (Morpheus) que introduce la energía mediante micropins que llevan el efecto del tratamiento hasta el corazón del problema a tratar.
La radiofrecuencia facial ofrece resultados naturales y progresivos que van aumentando con cada sesión. Aunque depende de cada persona y sus necesidades particulares. En la radiofrecuencia no invasiva es recomendable realizar una sesión de mantenimiento cada 2-3 meses. En la radiofrecuencia Morpheus son necesarias solo 3 sesiones y es suficiente realizar una sesión al año para mantener los resultados en estado óptimo.
En cuanto al procedimiento, la radiofrecuencia facial se basa en la emisión de corrientes para generar calor en las capas más profundas de la piel y así conseguir la contracción del colágeno y la elastina. Gracias al depósito del calor se genera un efecto de bioestimulación sobre los fibroblastos que incrementan su tasa de producción de nuevo colágeno y elastina. De esta manera, al aumentar la producción de colágeno, se consigue un mayor soporte para la piel y, por lo tanto, una mejor elasticidad y tersura. Entre sus múltiples ventajas, destaca su capacidad para conseguir resultados deseados sin alterar la parte más externa de la piel. Además, su recuperación es inmediata, lo que le permite al paciente recuperar su actividad diaria al momento.
Cuidados más importantes tras la radiofrecuencia facial
Otra de las grandes ventajas de la radiofrecuencia facial es que no requiere de cuidados severos o muy específicos tras su aplicación. Sin embargo, sí que es recomendable seguir una serie de consejos y cuidados después de radiofrecuencia facial tales como:
- No exponerse a fuentes de calor ni a la luz solar las primeras 24-48 horas..
- Se deben seguir las recomendaciones del médico experto en cuanto a la aplicación de cremas inmediatamente tras finalizar el tratamiento.
- Es normal la aparición de cierto enrojecimiento durante las primeras horas tras realizarse la sesión.
- En caso de alteraciones o anomalías, es necesario ponerse en contacto con el médico estético.
- Mantener una buena hidratación a nivel de ingesta de agua durante el tratamiento.
- Beber abundante agua.
- Los suplementos de colágeno orales pueden mejorar el resultado del tratamiento.
- Mantener la zona hidratada (crema hidratante) como hábito diario.
Recuerda que para mantener los resultados puede ser necesario repetir la sesión de radiofrecuencia facial de una manera periódica hasta conseguir los resultados deseados. En la radiofrecuencia de uso externo es interesante realizar una sesión de mantenimiento cada 2-3 meses. En la radiofrecuencia micro-invasiva Morpheus solo es necesario realizar una sesión de mantenimiento al año para prolongar sus resultados. Será tu médico estético quien te asesorará sobre el número de sesiones necesarias dependiendo el tipo de piel, objetivos y reacción de la piel ante la primera sesión.