El diagnóstico en Medicina Estética Corporal es imprescindible para obtener el mejor resultado, ya que cada tipo de problema estético requiere un tratamiento específico y una buena valoración inicial permite elegir el tratamiento que mejor se adapta a cada paciente. En este artículo detallamos las principales herramientas diagnósticas de los médicos de IML para los principales problemas del contorno corporal.
En este artículo encontrarás
¿Cuáles son las herramientas de diagnóstico en Medicina Estética Corporal?
Las principales alteraciones estéticas del contorno corporal están relacionadas con la piel (estrías, piel de naranja, flacidez) y con el tejido graso (cúmulos grasos localizados y nódulos de celulitis).
La mayoría de los problemas estéticos se diagnostican correctamente mediante un examen visual de la zona y mediante la realización de una historia clínica, lo que aporta información valiosa acerca de sus factores de riesgo, como los trastornos vasculares o la tendencia a la retención de líquidos.
Para clasificar el grado de celulitis, el médico puede aplicar el método de pinzamiento , que consiste en observar la respuesta de la piel al pellizcar una porción de tejido. Así, si al pinzamiento la piel sigue siendo lisa, el grado de celulitis es el menor posible. Y, por el contrario, si la piel presenta grandes nódulos en cualquier posición, el grado de celulitis que presenta el paciente es el máximo.
En Instituto Médico Láser contamos con otras herramientas de diagnóstico complementarias que ayudan tanto a diseñar el procedimiento más adecuado para cada paciente como a realizar un mejor seguimiento. Estas técnicas diagnósticas complementarias son:
- Antropometría
- Bioimpedancia
¿Qué es la antropometría?
La antropometría engloba una serie de medidas que los médicos de IML valoran en conjunto para un mejor enfoque del tratamiento y un seguimiento optimizado.
Las ponderaciones de la antropometría son:
- Peso
- Talla
- Circunferencias
- Pliegues cutáneos
Peso
Lo ideal es tomarlo en ayunas y en ropa interior. El peso por sí solo no es un dato que ayude a diagnosticar un posible sobrepeso u obesidad, por lo que es necesario cruzarlo con otras medidas.
Talla
La altura del paciente se toma mediante un tallímetro vertical, sin calzado.
Circunferencias
La medida de las circunferencias es útil para clasificar el tipo de obesidad, que puede ser ginoide (si el volumen es mayor en glúteos y trocánteres) o androide (si el volumen se localiza en el abdomen).
Las circunferencias de la cintura y del muslo se cruzan para un mejor seguimiento del tratamiento de los cúmulos grasos y la celulitis.
Pliegues cutáneos
La medida de los pliegues cutáneos es útil para valorar el grado de espesor de la grasa subcutánea y, con ella, determinar el grado de obesidad.
¿Qué es la bioimpedancia?
La bioimpedancia es un método diagnóstico para conocer los porcentajes de los componentes del organismo (grasa, líquidos, hueso y músculos).
Es una técnica de fácil aplicación y no invasiva que consiste en medir el paso de una corriente mínima entre dos puntos del organismo. El agua ofrece una resistencia muy baja. Los huesos y la grasa, muy alta. Por tanto, cuanto mayor volumen de grasa presente el organismo, éste responderá con un mayor grado de resistencia.
Esta herramienta diagnóstica permite obtener valores como el índice de masa corporal y aquellos relacionados con el metabolismo basal, ya que distingue entre masa muscular, masa grasa y agua corporal. En IML se aplica en caso de que sea necesario determinar el grado de obesidad del paciente y siempre que se requiera conocer con precisión aspectos como, por ejemplo, el porcentaje de masa grasa que debe perder el paciente para lograr los objetivos estéticos marcados.
Los datos que arroja la bioimpedancia pueden ser útiles a la hora de diseñar dietas muy específicas que requieran, por ejemplo, conocer el consumo metabólico del paciente o qué grupos musculares se deben potenciar, con el fin de optimizar el resultado del tratamiento médico-estético.
En la mayoría de los casos no es necesario realizar un estudio de bioimpedancia, ya que no todos los problemas estéticos del contorno corporal están ligados al peso del paciente. Por ejemplo, la piel de naranja es un inesteticismo muy común en mujeres, sin importar su peso, ya que pueden presentarla incluso aquellas que realizan un alto nivel de ejercicio físico. Asimismo, los cúmulos grasos localizados en zonas concretas, como las cartucheras o el abdomen, no suelen responder a la dieta y al ejercicio físico, por lo que no suelen requerir una pérdida de peso generalizada.