Nuestra práctica en el rejuvenecimiento facial y corporal mediante distintos tipos de hilos tensores pone de manifiesto que esta técnica goza de un buen nivel de aceptación gracias a sus numerosas ventajas, entre las que destacan su mínima invasividad, su carácter ambulatorio, sus materiales, reabsorbibles y biocompatibles, y la naturalidad de sus resultados.
Para obtener una idea lo más amplia posible sobre el grado de satisfacción obtenido mediante este tratamiento, en este artículo hemos recogido tanto las opiniones de nuestros pacientes como la experiencia de nuestros médicos especialistas de la Unidad de Medicina Estética.
En este artículo encontrarás
Hilos tensores: opiniones de nuestros pacientes
Los resultados del continuo seguimiento de la eficacia y satisfacción del paciente en el tratamiento con este tipo de suturas realizado en IML demuestra que, en la consulta del médico estético, esta técnica tiene un alto índice de valoraciones positivas por parte de la mayoría de nuestros pacientes, cuyas opiniones sobre los aspectos más destacados del tratamiento exponemos a continuación.
Opiniones sobre hilos faciales
Las zonas faciales donde se alcanzan los mayores grados de satisfacción en el tratamiento con hilos son la línea de la mandíbula y los pómulos .
La mayoría de los pacientes refiere una sensación de tensión en los tejidos tratados inmediatamente después de aplicar la técnica, lo que suelen describir textualmente como “me noto el pómulo más levantado”.
Para explicar esta sensación de tensión, muchas de nuestras pacientes la relacionan con la ligera tirantez que se siente tras aplicar una ampolla de belleza flash. (Nos referimos, obviamente, sólo a la sensación, no al efecto que produce cada tratamiento, puesto que en ningún caso serían comparables).
Según pasan las semanas, las pacientes refieren una mejor textura de la piel y de los tejidos, lo que describen como si la zona tratada estuviera más “jugosa”, más densa.
El tercer mes es el momento en el que la mayor parte de nuestras pacientes aprecia mejor los resultados, que tienen una duración media de 15 meses .
Por lo general es un tratamiento bien tolerado. Durante la primera semana tras la aplicación de los hilos es normal presentar un ligero edema y, según la respuesta propia de cada paciente, puede producirse algún hematoma que, según refieren, desaparece en poco tiempo.
Otro de los aspectos que mejor valoran es que no producen volumen, sino sólo tersura.
Nuestras pacientes saben que el resultado de los hilos es temporal y opinan que el tratamiento es ideal para lucir un aspecto de buena cara en una ocasión especial .
Opiniones sobre hilos corporales
El rango de edad más frecuente de las pacientes a las que se les indica este tratamiento es de entre 35 y 50 años.
Las zonas corporales más demandadas por nuestros pacientes para el tratamiento con estas suturas son la cara interna de los brazos y la de los muslos .
En la mayoría de los casos, la satisfacción del paciente con los resultados suele ser mayor cuando, transcurridos entre 5 y 6 meses de la implantación de los hilos, se aplica un tratamiento complementario de 3 sesiones de radiofrecuencia.
Al igual que sucedía con las opiniones en el rostro, los pacientes reseñan que los resultados de los hilos corporales son mucho más evidentes al alcanzar el tercer mes. La duración media de los hilos es de entre 12 y 15 meses.
Tratamiento con hilos: la experiencia de nuestros médicos
Según la experiencia de nuestros médicos estéticos, los resultados de este tratamiento pueden ser muy satisfactorios valorando cada caso de forma específica, si el grado de ptosis es moderado y si el paciente sigue correctamente las indicaciones post-tratamiento, como no masajear la zona tratada o dormir boca arriba.
En opinión de nuestros médicos estéticos, la técnica con hilos reabsorbibles puede ser un buen tratamiento preventivo de la flacidez facial, así como para mejorar los casos de descenso de tejidos de grado leve.
“Es necesario transmitir al paciente expectativas realistas, tanto de resultados como de la duración de los mismos, ya que los hilos crean un efecto tensor, pero no comparable al que se puede obtener mediante un lifting ”.
Según nuestra experiencia, los mejores resultados con esta técnica se obtienen en grados de envejecimiento I y II, según la escala de Glogau, y, por lo general, en pacientes de entre 40 y 55 años en la zona del tercio medio facial.
La Dra. Almudena Royo Pérez, médico especialista de la Unidad de Medicina Estética de IML, asegura que la preocupación estética principal de las pacientes femeninas a la hora de consulta por el tratamiento con hilos es la flacidez del tercio inferior, que provoca un descolgamiento del óvalo facial , así como la definición de la mandíbula en el caso de los pacientes varones.
La Dra. Royo Pérez destaca el tipo de resultados que ofrece esta técnica, ya que se ajusta a su filosofía de naturalidad y discreción. “El resultado obtenido es sutil. Se nota claramente la mejoría, pero en forma de buena cara o mejor aspecto, sin que sea muy evidente el tipo de procedimiento realizado”.